lunes, 15 de diciembre de 2014

¡Feliz cumpleaños majestad!

15 de Diciembre es la fecha que escogí para el nacimiento de mi protagonista, en la primera parte de "El Príncipe de Bórdovar" pueden leer sobre lo que significa este día para él, no sólo se trata de su cumpleaños sino de algo más que lo hizo muy feliz. En la cuarta parte de "Nieblas del Pasado" volveremos a ese mismo día en el tiempo, cuando él nació, algo que en lo personal me pone emotiva, aquí les comparto un pequeño fragmento. ¿Quieren volver conmigo en el tiempo?



El trabajo de parto fue muy difícil, estaba muy cansada, ya no tenía fuerzas, sentía que no podía, me sentía desfallecer.
—Mi niña una vez más, tú puedes —me decía Tita sujetando mi mano con fuerza y limpiando el sudor de mi frente y cuello.
—Majestad es importante un último impulso —escuché que dijo el doctor Khrauss—. Pronto tendrá a su bebé en brazos.
Pensar en mi hijo me dio las fuerzas, deseaba verlo, estrecharlo y llenarlo de besos y ternura, tomé el aire necesario y pujé una vez más con todas mis fuerzas. Sentía que la espalda se me iba a partir en dos y que todos los órganos se me iban a desprender, el dolor era insoportable pero pensar en mi bebé fue mi motivación, ya faltaba poco, dejé mis fuerzas en él, por fin pude dar a luz y al escuchar su llanto fue mi alivio, el sudor y mis lágrimas se mezclaron.
—Oh es hermoso —dijo Tita llorando de alegría.
—Así es, un hermoso y robusto varón, el príncipe heredero por fin nació, bienvenido su alteza —dijo el doctor Khrauss teniéndolo en sus manos y reverenciándolo a la vez.
 Mi felicidad era indescriptible y no paraba de reír y llorar a la vez, mi príncipe, mi niño, el heredero, mi Loui ya había nacido, cumplí con mi deber.